El 25 de noviembre de 1999 fue declarado como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, pero sin embargo, en Latinoamérica, esta fecha se conmemora desde el año 1981: El asesinato de las hermanas Mirabal, conocidas como “las mariposas”, fue uno de los detonantes de la caída del Gobernante Rafael Trujillo, que gobernó la República Dominicana desde 1930 hasta su asesinato en 1961.
Ellas se convirtieron en un símbolo de organización y lucha contra la violencia de género que afecta a las mujeres de todo el mundo.
Veinte años más tarde, en 1981, se celebró en Bogotá el Primer Encuentro Feminista de Latinoamérica y el Caribe donde se decidió asignar al 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, en memoria de Patria, Minerva y María Teresa Mirabal.
El objetivo de esta fecha no sólo es llamar la atención sobre la desigualdad, la discriminación, los femicidios y las distintas formas de violencia machista, sino también reclamar la implementación de las políticas públicas que aún faltan para prevenirla y extirparla.
Hoy, en Argentina, en Neuquén y en San Martín de los Andes, hay una voluntad concreta de implementar políticas que ayuden a terminar con esta violencia, que no solamente es física, sino también psicológica, laboral, económica, política e institucional.
Hoy, más que nunca, las personas, las Instituciones y las Organizaciones debemos comprometernos a repudiar a aquellas situaciones o personas que generen violencia sobre otras y nosotras mismas; y, como personas, desafiarnos a reconstruirnos y trabajar para lograr una sociedad más justa, libre e inclusiva.
Porque le decimos NO a todo tipo de violencia de Género, sigamos trabajando en ese camino.
Emilia Otharan – Marcelo E.Novoa, Dirección de Derechos Humanos ,Equidad de Género, Diversidad, Mediación comunitaria.
