Distrito IX ditribuirá guantes y barbijos para el descarte de los ejemplares aparecidos, mientras que Mantenimiento Escolar ya coordinó una nueva inspección al lugar.
Luego de que la Escuela 33 de Quila Quina decidiera suspender sus actividades por el hallazgo de roedores muertos en inmediaciones del establecimiento, se constató que los publicados en redes sociales NO son de la especie conocida como “colilargos”, transmisora del hantavirus, aunque recomendaron tomar los recaudos necesarios para la manipulación y disposición final en este tipo de situaciones.
En este sentido y por recomendación del Director del Hospital Ramón Carrillo, Juan Cabrera, y de personal de Zona Sanitaria IV, la titular del Distrito IX, Sandra Tous, entregará barbijos y guantes, tanto en la Escuela 33 como en todas las rurales, para tomar los recaudos necesarios ante estos casos, siguiendo las indicaciones del Ministerio de Salud de la provincia para el descarte de roedores muertos:
- Antes de cualquier acción, rociar las heces o roedores con lavandina diluida en agua o detergente.
- Una vez húmedos, el roedor, sus heces o restos se pueden limpiar usando siempre guantes o, en su defecto, bolsas impermeables colocadas en las manos.
- Los roedores muertos deben colocarse en doble bolsa cerrada antes de su descarte. El método de disposición final recomendado es la incineración o quema; en su defecto, se recomienda enterrarlo a más de 30 cm de profundidad.
- Todo material que pudo haber estado en contacto con roedores debe desinfectarse como se explicó anteriormente y exponerse al sol, ya que los rayos UV desactivan el virus.
Se había desratizado en noviembre
Por otra parte, desde Mantenimiento Escolar, a cargo de Daniel Opel, se detalló que se concretó una desratización en la Escuela 33 en el mes de noviembre, firmada por el Director del establecimiento, y que los ejemplares aparecidos también pueden corresponder a esta situación. De todas formas, se realizará en el lugar una nueva inspección con personal de desinfección.
